jueves, 15 de enero de 2009
Oración al día.
Otro coco
El sol en caída libre deja asomar su aspa asesina, amanecer de lo oculto, sueño de los días perdidos, panacea de placer, locura de arrugas, cicatrices de cuchillas que no perdonan. Pero ahí esta la primera huella de nuestra madre que escapa a los miedos, arrulladores son sus pasos y sus manos como muertos ramilletes color de oro, dama de noche y fin del día, irrumpes en mi templo sacándome del juego. ¿Y quien ahora es el líder, quien guiara la manada de los locos lobos que no crecen?
Ningún dios va a hundir sus manos, quemar su piel para elevar el astro asesino, dejándome tres pasos más para que pueda, hundir mi piel en tu gimiente cuerpo, beber la azulada sal de tus sonrisas, para secar tus dos lagunas llenas y retirarme como si nadie ha perdido. Pues nada superará jamás los llantos, de aquel que todo lo ha tenido, y contingente es el cielo y tuyo sea el cuerpo que se ha dormido, o soy yo el que no sabe si debo o no buscar en mi algún latido.
Y te iras cuando llegue el frío.
Imagen desde: http://chalo84.deviantart.com/art/Amanecer-Londres-94415806
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